¿Utopía o distopía?

Mientras Julian está en el baño echo un ojo a la mesa del fondo. Hace nueve años y pico, sentados alrededor de esa mesa, Larry, un pelirrojo Julian, Yasin, y yo hablábamos del plan que echaría abajo UKCAF. Un día después Larry moría intentando llevarlo a cabo. Nunca hemos sabido si Larry logró introducir Némesis en el sistema, aunque todos los informes de inteligencia de la CIA apuntan a que sí, y que murió intentando escapar.

En estos casi diez años he seguido ejerciendo de periodista de UKNews alcanzando el puesto de redactor jefe. Eso ha sido posible gracias a que mis huellas fueron bien cubiertas gracias a Yasin. Se me informó puntualmente días después de nuestra operación de los detalles que me eran desconocidos. Todos los efectivos de seguridad de los controles de la carretera de la reserva natural que me habían visto haciendo uso de mi acreditación de UKNews para pasar con el Corolla habían sido eliminados en sus casas la misma noche. Así como el guardia que me dio paso al complejo. Supe también que lo que inyectó Julian al jefe Harrelson era una supertoxina que le mató en minutos y que los mensajes que mandó Julian una vez habíamos atravesado el pasillo eran para Larry y su contenido eran los códigos de seguridad que Harrelson había tecleado en las puertas. Así Larry pudo recorrer el pasillo y tener un acceso directo a node01 desde la prisión.

Me contaron que parte de la misión de Larry era colocar en el asiento del conductor un cadáver que iba escondido bajo los asientos traseros del Corolla para acto seguido, y antes de internarse en node01 activar un temporizador de una bomba que haría explotar el Toyota minutos más tarde. Ni Julian ni yo sabíamos nada de esto, y no oímos la explosión del coche porque probablemente estábamos ya bajo el agua, pero este hecho me dio la tapadera perfecta y evitó una investigación para buscar al conductor porque obviamente ahí lo tenían, muerto y calcinado. La CIA sabe con certeza que Larry logró entrar en node01 y salir de allí, y que en algún momento de ese proceso fue descubierto. Por cuando empezamos a oír las sirenas se deduce que le empezaron a seguir cuando huía hacia el pasadizo que nosotros habíamos usado anteriormente y que debería haber podido instalar Némesis.

En cuanto a Julian hoy es la primera vez que lo veo desde aquel día en la presa de Derwent. Nos hemos reunido a instancias de un mensaje de Yasin, porque según sus contactos en UKeyes hoy se activa la red de nanociudades a nivel estatal a las 18:00. Esto coincide con la programación oficial de la televisión de hoy. Hay un mensaje gubernamental programado para las 18:10 en el que probablemente se haga el anuncio oficial de la activación de la red de nanociudades. Estos mensajes se retransmiten en cada televisor, pantalla publicitaria o dispositivo móvil (estos últimos años se ha ido reimplantando la telefonía móvil de manera controlada) de manera obligada. Es una forma cómoda de adoctrinar a la gente.

Cuando se active la red y si Larry logró completar su misión, Némesis debería empezar a actuar, ya que tendría acceso a todos los nodos, no sólo al node01 correspondiente a Manchester. Las nanociudades han estado funcionando de forma independiente una tras otra y todas han probado ser decisivas para frenar el avance de la resistencia. Si estás fichado, salir a la calle puede suponer que te apresen en cinco minutos. La propia ciudad usa sus recursos para aislarte y delatarte. Es delirante. Hace un par de años un joven de la resistencia fue cazado en Brighton al apretar el botón de un semáforo para indicarle que quería ponerse verde. Nadie conocía su cara, pero sus huellas estaban fichadas y el semáforo lo identificó y le soltó una descarga dejándolo inconsciente. La calle se cerró al paso de vehículos con bolardos y las sirenas de los comercios cercanos empezaron a sonar. Los coches de las patrullas próximas tomaron el control de manera automática y las cámaras de vigilancia fijaron su objetivo en el chico. En dos minutos y mientras recuperaba la consciencia ya estaba rodeado. Y esto en una ciudad como Brighton, que no tiene la mitad de sistemas instalados que puede tener Londres o la misma Manchester.

Como ya he dicho, trabajo de redactor jefe para UKNews, y cuando me tocó cubrir el «acto terrorista» en el que yo mismo había participado nos llegaron a la redacción informaciones desde UKeyes que apuntaban a que la disidencia había tratado de atentar por medio de un coche bomba en la sede central de UKCAF de Manchester. Uno de los terroristas había sido abatido e identificado como Larry Page, fugitivo en busca y captura. El conductor que logró entrar en el complejo había muerto en la explosión del coche bomba y se desconocía su identidad. En el proceso habían acabado con la vida del jefe de seguridad Harrelson.

Meses después el nombre del jefe Harrelson pasó de mártir a traidor. Estaba muerto, pero tras la investigación fue declarado culpable de conspiración terrorista contra UKCAF por permitir la entrada de Larry y su acompañante. Se concluyó que Harrelson estaba motivado por su sed de venganza al ser rechazado en innumerables ocasiones para UKeyes, y quería dejarles en ridículo. Documentos que probaban estos extremos fueron encontrados en su casa de Chelsea en Londres. Evidentemente estos documentos habían sido colocados por la resistencia y la CIA en previsión a la investigación de UKeyes, mostrando un plan totalmente ficticio. La CIA también se había ocupado de destruir las fotos de Julian que deposité en el buzón de Harrelson en su casa de Manchester. Me consta que la nanotecnología tiene aplicaciones para hacer desaparecer el papel de forma eficiente y sin dejar residuos.

Mientras rememoro todos estos hechos mirando a la mesa oigo salir a Julian del baño. Vuelve a la barra y se sienta de nuevo a mi lado.

Julian: Parker, sé que quieres hacerme esta entrevista para ese libro que mostrará todo lo que has vivido y que publicarás después de liberar Reino Unido de UKCAF. Y sé que quieres editarlo mediante la renacida WikiLeaks. Sabes que me halaga. Pero son las 17:55 —señala su reloj— así que ¿por qué no esperamos estos cinco minutos disfrutando de dos pintas a ver si Némesis hace «algo»?

Parker: Me parece buena idea. ¡Camarero! Dos pintas tostadas por favor.

Mientras saboreamos el zumo de cebada pasan los minutos, ni despacio, ni deprisa. Miro el farol de la puerta, que hace años se movía bajo una tempestad. Giro en el mismo taburete hace años me vio esperar la llegada de Yasin. Y me miro en el espejo que hay tras la barra viendo una persona que hace años era un joven ingenuo, y que hoy es un perro viejo. Dan las 18:00 y aparentemente todo sigue igual. Sin embargo todas las televisiones del local se encienden a la vez, y eso que el mensaje gubernamental estaba programado para las 18:10…

Julian: ¿Crees que esto tiene algo que ver con Némesis?

Parker: Espero que sí —y me encojo de hombros—.

Larry aparece en pantalla. Julian y yo sonreímos y nos miramos. El tipo está tomando un té. Y todo el país va a escuchar lo que tiene que decir. Es como si esa ráfaga de balas que le atravesó el pecho no lo hubiese matado del todo.

Larry: Queridos amigos televidentes y ciudadanos del Reino Unido. Mi nombre es Larry Page y si estáis viendo este vídeo es que yo estoy muerto y mi asesinato se ha encubierto tildándome de terrorista. Antes de que UKCAF me encarcelase sin juicio por ser un «hombre peligroso», y antes de fugarme para vivir en la resistencia, fui uno de los creadores de Google. Sin embargo mi mayor obra es esta. He dado mi vida por la libertad y vuelvo desde la tumba para abriros los ojos y recordaros lo obvio: todos vosotros sabéis lo que UKCAF ha hecho con vuestro país. Sé que os habéis resignado y sé que en vuestra intimidad os arrepentís de haberles dado todo el poder que ahora tienen. Sí amigos, son unos malvados. Pero si queréis buscar a los culpables de esta situación sólo tenéis que miraros al espejo. Sé por qué lo hicisteis, sé que teníais miedo, ¿y quién no? Guerras, terror, enfermedades… Había una plaga de problemas que conspiraron para corromper vuestros sentidos y sorberos el sentido común. El temor pudo con vosotros y presas del pánico acudisteis a UKCAF. Os prometieron orden, os prometieron paz, y todo cuanto os pidieron a cambio fue vuestra silenciosa y obendiente sumisión. Hace años puse la semilla para poner fin a ese silencio, y hoy esa planta que lleva creciendo años, florece. Desde hoy UKCAF no tiene poder. 

Se va la luz. Nos quedamos a oscuras. La gente se inquieta y empieza a salir a la calle, vemos que la noche engulle la ciudad y no se ve una luz por ninguna parte. Es un apagón general. Némesis está actuando y está mostrando su control. Es impresionante. Larry ha parafraseado aquella escena de V de Vendetta, cuando V se dirige a la gente de Londres pirateando la señal de televisión del corrupto gobierno y ha dado un golpe de efecto genial. De repente por los altavoces repartidos por toda la ciudad se empieza a oír música… ¿dónde he oído antes esta canción? La gente escucha ensimismada como cantan esas dos mujeres aunque no entiende nada de lo que dicen. No tardo en darme cuenta donde oí esto antes y vuelvo a sonreír pensando en Larry. No sabía que fuese tan cinéfilo, pero es un guiño magnífico a la libertad. Está reproduciendo la escena del tocadistos de Cadena Perpetua. La música acaba y vemos claridad en el interior de MacDevitt’s. Las televisiones se han encendido, pero todo lo demás sigue a oscuras. Volvemos a entrar con una curiosidad imposible de describir.

Larry: Veis a UKCAF como un gigante. Os lleva engañando mucho tiempo y el poder que tiene no es tal. El poder reside donde los hombres creen que reside, ni más, ni menos. Es hora de que empecéis a creer que el poder está en vosotros. Esta noche debéis salir y tomar las calles. Las nanociudades no os perseguirán ni os delatarán. Al contrario, hoy los que os han coartado durante tantos años serán los señalados. Ningún miembro de UKCAF tendrá dónde esconderse. Dejaos guiar por la resistencia en las calles y no busquéis venganza, sino justicia. Mi sacrificio es en pos de la libertad y la democracia. Y la democracia juzgará a los tiranos que os han sometido durante años. Antes de irme quiero darle las gracias a mis dos hermanos, ellos saben quienes son. Sin vosotros nada de esto habría sido posible, y si no estoy con vosotros es porque no había otra opción. El tiempo es finito, y yo no tenía suficiente. Un abrazo.

¡Plof! Y así de repente se acaba el mensaje y vuelve la luz. La tele muestra imágenes de las calles de las ciudades de Reino Unido y la gente está exultante y sale al exterior a celebrar el fin de una era. Julian y yo nos miramos. Tenemos lágrimas en los ojos y nos fundimos en un abrazo. Larry lo consiguió, y además se sacrificó sabiendo que la misión era suicida.

Salimos de MacDevitt’s respirando una libertad que hace años que no teníamos. Las calles fluyen en una algarabía difícil de describir y en la esquina del callejón distinguimos una silueta familiar. Una gabardina y un sombrero se recortan a la luz de la farola. Es Yasin, que descubre su cara y se acerca a felicitarnos. Nos informa de que la flota estadounidense avanza sin resistencia y que en menos de una semana Reino Unido debería estar liberado. Habrá pequeños combates y escaramuzas, y la «justicia» popular se cobrará sus víctimas, pero el mensaje de Larry ha promovido que la revolución sea mayormente pacífica. Yasin nos confiesa también que el mensaje no era parte del plan, y que Larry probablemente lo introdujo junto con Némesis, preprogramando la rutina del apagón y la música con la esperanza de que llegado el día de hoy, se derramase la mínima sangre. Nos dice que el proceso de instalar el virus no debería haberle llevado más de dos minutos, pero que cargar un vídeo del tamaño del mostrado debió llevarle unos minutos extra. Y que es posible que esos minutos de más fueron los que le costaron la vida.

Pasamos la noche recorriendo las calles, celebrando y brindando por Larry. Sin embargo no puedo dejar de pensar en lo que se avecina. ¿Serán las intenciones de EEUU buenas? ¿O viviremos un imperialismo peor? Tengo fe en haber hecho lo correcto, pero no lo tengo claro. ¿Hacia dónde vamos? ¿A una utopía o a una distopía?

FIN